Juana Azurduy


Juana Azurduy (12 de Julio 1780 - 25 de Mayo 1862)

Nació en el Alto Perú, Virreinato del Río de La Plata, actual Bolivia, y vivió varios años en Salta, Argentina.
Fue Coronel del Ejército Libertador que luchó contra los realistas.
Vió morir a sus cuatro hijos y luchó estando embarazada de su quinta hija. Su esposo, Manuel Padilla, muere al intentar rescatarla en combate cuando ella fue herida en la Batalla de La Laguna.
Luchó junto a Manuel Belgrano y luego con el General Güemes.

Murió cuando estaba por cumplir los 82 años, indigente. Fue enterrada en una fosa común.
Sus restos, exhumados 100 años después, descansan en un mausoleo creado en su honor en la ciudad de Sucre, Bolivia.

Simón Bolívar dijo de ella al verla en Bolivia: "Este país no debería llamarse Bolivia en mi homenaje, sino Padilla o Azurduy, porque son ellos los que lo hicieron libre."

El folklore argentino le rinde homenaje en la cueca "Juana Azurduy" con letra de Félix Luna y música de Ariel Ramírez.

DANZA

MUSICA Y LETRA

Vermouth con papa frita y good show! - Monólogo


La culpa de todo la tiene el ministro de Economia dijo uno.
!No señor! dijo el ministro de Economia mientras buscaba un mango debajo del zocalo. La culpa de todo la tienen los evasores."

!Mentiras! dijeron los evasores mientras cobraban el 50 por ciento en negro y el otro 50 por ciento tambien en negro. La culpa de todo la tienen los que nos quieren matar con tanto impuesto.

!Falso! dijeron los de la DGI mientras preparaban un nuevo impuesto al estornudo. La culpa de todo la tiene la patria contratista; ellos se llevaron toda la guita.

!Pero, por favor...! dijo un empresario de la patria contratista mientras cobraba peaje a la entrada de las escuelas publicas. La culpa de todo la tienen los de la patria financiera.

!Calumnias! dijo un banquero mientras depositaba a su madre a siete dias. La culpa de todo la tienen los corruptos que no tienen moral.

!Se equivoca! dijo un corrupto mientras vendia a cien dolares un libro que se llamaba "Haga su propio curro" pero que, en realidad, solo contenia paginas en blanco. La culpa de todo la tiene la burocracia que hace aumentar el gasto publico.

!No es cierto! dijo un empleado publico mientas con una mano se rascaba el pupo y con la otra el trasero. La culpa de todo la tienen los politicos que prometen una cosa para nosotros y hacen otra para ellos.

!Eso es pura maldad! dijo un diputado mientras preguntaba donde quedaba el edificio del Congreso. La culpa de todo la tienen los dueños de la tierra que no nos dejaron nada.

!Patrañas! dijo un terrateniente mientras contaba hectareas, vacas, ovejas, peones y recordaba antiguos viajes a Francia y añoraba el placer de tirar manteca al techo. La culpa de todo la tienen los comunistas.

!Perversos! dijeron los del politburo local mientras bajaban linea para elaborar el duelo. La culpa de todo la tiene la guerrilla trotskista.

!Verso! dijo un guerrillero mientras armaba un coche-bomba para salvar a la humanidad. La culpa de todo la tienen los fascistas.!Malvados! dijo un fascista mientras quemaba una parva de libros juntamente con el librero. La culpa de todo la tienen los judios.

!Racistas! dijo un sionista mientras miraba torcido a un coreano del Once. La culpa de todo la tienen los curas que siempre se meten en lo que no les importa

!Blasfemia! dijo un obispo mientras fabricaba ojos de agujas como para que pasaran diez camellos al trote. La culpa de todo la tienen los cientificos que creen en el Big Bang y no en Dios.

!Error! dijo un cientifico mientras diseñaba una bomba capaz de matar mas gente en menos tiempo con menos ruido y mucho mas barata. La culpa de todo la tienen los padres que no educan a sus hijos.

!Infamia! dijo un padre mientras trataba de recordar cuantos hijos tenia exactamente. La culpa de todo la tienen los ladrones que no nos dejan vivir.

!Me ofenden! dijo un ladron mientras arrebataba una cadenita a una jubilada y, de paso, la tiraba debajo del tren. La culpa de todo la tienen los policias que tienen el gatillo facil y la pizza abundante.

!Minga! dijo un policia mientras primero tiraba y despues preguntaba. La culpa de todo la tiene la Justicia que permite que los delincuentes entren por una puerta y salgan por la otra.

Desacato! dijo un juez mientras cosia pacientemente un expediente de mas de quinientas fojas que luego, a la noche, volveria a descoser.La culpa de todo la tienen los militares que siempre se creyeron los dueños de la verdad y los salvadores de la patria.

!Negativo! dijo un coronel mientras ordenaba a su asistente que fuera preparando buen tiempo para el fin de semana. La culpa de todo la tienen los jovenes de pelo largo.

!Ustedes estan del coco! dijo un joven mientras pedia explicaciones de por que para ingresar a la facultad habia que saber leer y escribir. La culpa de todo la tienen los ancianos por dejarnos el pais que nos dejaron.

!Embusteros! dijo un señor mayor mientras pregonaba que para volver a las viejas buenas epocas nada mejor que una buena guerra mundial.La culpa de todo la tienen los periodistas porque junto con la noticia aprovechan para contrabandear ideas y negocios propios.

!Censura! dijo un periodista mientras, con los dedos cruzados, rezaba por la violacion y el asesinato nuestro de cada dia. La culpa de todo la tiene el imperialismo.

Thats not true! (!Eso no es verdad!) dijo un imperialista mientras cargaba en su barco un trozo de territorio con su subsuelo, su espacio aereo y su gente incluida. The ones to blame are the sepoy, that allowed us to take even the cat (la culpa la tienen los cipayos que nos permitieron llevarnos hasta el gato).

!Infundios! dijo un cipayo mientras marcaba en un plano las provincias mas rentables. La culpa de todo la tiene Magoya.

!Ridiculo! dijo Magoya acostumbrado a estas situaciones. La culpa de todo la tiene Montoto.
!Cobardes! dijo Montoto que de esto tambien sabia un monton. La culpa de todo la tiene la gente como vos por escribir boludeces.

!Paren la mano! dije yo mientras me protegia detras de un buzon.
Yo se quien tiene la culpa de todo. La culpa de todo la tiene El Otro.
!El Otro siempre tiene la culpa!
!Eso, eso! exclamaron todos a coro. El señor tiene razon: la culpa de todo la tiene El Otro.
Dicho lo cual, despues de gritar un rato, romper algunas vidrieras y/o pagar alguna solicitada, y/o concurrir a algun programa de opinion en television (de acuerdo con cada estilo), nos marchamos a nuestras casas por ser ya la hora de cenar y porque el culpable ya habia sido descubierto. Mientras nos ibamos no podiamos dejar de pensar:
!Que flor de guacho que resulto ser El Otro...!

Tato Bores (1927 - 1996)

Lo que esperamos

Tardará, tardará.

Ya sé que todavía
los émbolos,
la usura,
el sudor,
las bobinas
seguirán produciendo,
al por mayor,
en serie,
iniquidad,
ayuno,
rencor,
desesperanza;
para que las lombrices con huecos portasenos,
las vacas de embajada,
los viejos paquidermos de esfínteres crinudos,
se sacien de adulterios,
de hastío,
de diamantes,
de caviar,
de remedios.

Ya sé que todavía pasarán muchos años
para que estos crustáceos
del asfalto
y la mugre
se limpien la cabeza,
se alejen de la envidia,
no idolatren la saña,
no adoren la impostura,
y abandonen su costra
de opresión,
de ceguera,
de mezquindad.
de bosta.

Pero, quizás, un día,
antes de que la tierra se canse de atraernos
y brindarnos su seno,
el cerebro les sirva para sentirse humanos,
ser hombres,
ser mujeres,
-no cajas de caudales,
ni perchas desoladas-,
someter a las ruedas,
impedir que nos maten,
comprobar que la vida se arranca y despedaza
los chalecos de fuerza de todos los sistemas;
y descubrir, de nuevo, que todas las riquezas
se encuentran en nosotros y no bajo la tierra.

Y entonces...
¡Ah!, ese día
abriremos los brazos
sin temer que el instinto nos muerda los garrones,
ni recelar de todo,
hasta de nuestra sombra;
y seremos capaces de acercarnos al pasto,
a la noche,
a los ríos,
sin rubor,
mansamente,
con las pupilas claras,
con las manos tranquilas;
y usaremos palabras sustanciosas,
auténticas;
no como esos vocablos erizados de inquina
que babean las hienas al instarnos al odio,
ni aquellos que se asfixian
en estrofas de almíbar
y fustigada clara de huevo corrompido;
sino palabras simples,
de arroyo,
de raíces,
que en vez de separarnos
nos acerquen un poco;
o mejor todavía
guardaremos silencio
para tomar el pulso a todo lo que existe
y vivir el milagro de cuanto nos rodea,
mientras alguien nos diga,
con una voz de roble,
lo que desde hace siglos
esperamos en vano.

Oliverio Girondo (1891-1967)

Coplas del payador perseguido - fragmento


La sangre tiene razones que hacen engordar las venas
Pena sobre pena y pena hacen que uno pegue el grito
La arena es un puñadito pero hay montañas de arena.

No se si mi canto es lindo o si saldrá medio triste
Nunca fui zorzal ni existe plumaje más ordinario
Yo soy un pájaro corsario que no conoce el alpiste.

Vuelo porque no me arrastro, que el arrastrarse es la ruina
Anido en árbol de espinas lo mismo que en cordillera
Sin escuchar las zonzeras del que vuela a lo gallina.

No me arrimo así nomás a los jardines floridos
Sin querer vivo alvertido pa' no pisar el palito
Hay pájaros que solitos se entrampan por presumidos.

Aunque mucho he padecido no me engrilla la prudencia
Es una falsa experiencia vivir temblándole a todo
Cada cual tiene su modo, la rebelión es mi esencia.

Pobre nací, pobre vivo, por eso soy delicao
Estoy con los de mi lao cinchando tuítos parejo
pa' hacer nuevo lo que es viejo y verlo al punto cambiao.

Yo soy de los del montón, no soy flor de invernadero
Soy como el trébol pampero, crezco sin hacer barullo
Me apreto contra los yuyos y así aguanto al pampero.

Acostumbrao a la sierra yo nunca me se marear
Si me siento alabar me voy yendo despacito
Pero aquél que es compadrito paga pa' hacerse nombrar.

Si alguien me dice "Señor" agradezco el homenaje
Mas soy gaucho entre el gauchaje y soy nada entre los sabios
Y son pa' mí los agravios que le hagan al paisanaje.


Atahualpa Yupanqui (1908-1992)

Vuelvo al sur

Vuelvo al Sur,
como se vuelve siempre al amor,
vuelvo a vos,
con mi deseo, con mi temor.

Llevo el Sur,
como un destino del corazón,
soy del Sur,
como los aires del bandoneón.

Sueño el Sur,
inmensa luna, cielo al reves,
busco el Sur,
el tiempo abierto, y su después.

Quiero al Sur,
su buena gente, su dignidad,
siento al Sur,
como tu cuerpo en la intimidad.

Te quiero Sur,
Sur, te quiero.